" Y las señales seguirán a los que creen.."
El ‘Cilindro de Ciro’ citado como evidencia de una historia extra-bíblica del Antiguo Testamento sobre el exilio de los antiguos hebreos, se espera que este año visite varios museos estadounidenses, y luego regrese a su casa en el Museo Británico.
El artefacto, con forma de barril, y el tamaño de una pelota de béisbol, se considera de especial importancia para los arqueólogos y eruditos bíblicos, ya que coincide con las historias de los libros mencionados: “Crónicas, Daniel, Isaías y Esdras, sobre los imperios babilónico y persa, y la deportación de Jerusalén”.
El Cilindro de Ciro es una pieza cilíndrica de arcilla que contiene una declaración en cuneiforme acadio babilonio del rey persa Ciro el Grande (559-529 a. C.) En ella, el nuevo rey legitima su conquista y toma medidas políticas para ganarse el favor de sus nuevos súbditos.
Fue descubierto en 1879 por el arqueólogo asirio-británico Hormuz Rassam durante la excavación del templo de Marduk en Babilonia. Consiste en dos fragmentos, llamados “A” y “B”. El primero permaneció en el Museo Británico desde su descubrimiento, mientras que el segundo fue custodiado en la Universidad de Yale hasta su traslado al Museo Británico, donde se encuentra actualmente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario